El aire comprimido es una energía usada en toda clase de industrias, talleres, manufacturas, laboratorios, …….
Como un fluido a presión, su empleo produce unos riesgos específicos que pueden hacerlo peligroso en casos de mala utilización.
Por eso, es imprescindible acometer una serie de medidas de seguridad para evitar accidentes, tanto en su uso para movimiento de máquinas y el accionamiento de herramientas portátiles, como para su manipulación en mantenimientos que se deben realizar regularmente por el usuario
Enrolladores para manguera. Una solución práctica para tener sus mangueras en buen estado y recogidas
Unas reglas básicas son:
- Purgar con regularidad las conducciones de aire mediante los purgadores puestos en la instalación a tal fin
- Verificar el estado de manguera y tuberías flexibles (latiguillos), evitando que existan dobleces o codos que obturen el paso del aire
- Las mangueras y/o tuberías flexibles deben situarse de forma que no puedan ser dañadas o provoquen caídas por tropiezos. Las mangueras nunca deben doblarse
- El aire comprimido es un fluido a presión, no debe usarse para limpiar la ropa o el cuerpo. No se debe dirigir la salida del aire hacía las personas.
- Se recomienda la instalación de llaves de paso en las tomas de utilización para poder cortar el paso para la conexión de herramientas neumáticas
- Se debe usar con los EPIs apropiados (gafas de seguridad, guantes, calzados y protección auditiva)
- Hay que revisar periódicamente los acoplamientos de las herramientas a las mangueras
- Periódicamente, hay que comprobar y corregir las fugas de aire
- Hay que desconectar las herramientas de la conexión de aire, ya que pueden producir lesiones. Desconectar siempre con la mano, nunca con la presión del equipo o la línea. No tirar de las mangueras para desconectar las conexiones
- Siempre que se vaya a realizar alguna manipulación en el compresor y sus accesorios hay que desconectarlos de la red eléctrica y vaciar de aire el depósito, dejando el compresor sin presión
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